El sector textil en la República Mexicana es de los más importantes del país por el número de empleos generados. Históricamente es conocido este ramo como una industria social, por su tradición de contratar mano de obra femenina, siendo un factor importante para ayudar a las jefas de familia en salir adelante en sus comunidades. Sanper de México pertenece a Grupo Industrial Gasaer S. de R.L. de C.V., una empresa textil con más de 15 años de amplia experiencia en la industria del vestido. En la multiplicidad de sus operaciones, se provee de plantillas para el calzado de todo tipo. El manejo de la producción de Goma Eva es distribuido para la industria automotriz y de calzado.
Los textiles en México: tradición y modernidad
Desde los tiempos prehispánicos, nuestro país hereda una tradición en el arte de los textiles. La creatividad y trabajo manual ha pasado por siglos de mestizaje e innovación, principalmente la de las diferentes etnias, la cual ha generado sin número de técnicas y diseños en un espectro multicultural catalogado como patrimonio cultural invaluable. Los diseños de hace siglos en la tradición mexicana siguen tejiéndose, siendo piezas de museo e inspiración para todos los modistas del mundo.
En los orígenes de los textiles en la época prehispánica, estos productos eran una artesanía, al uso común. El algodón se cosechaba y se usaba para confeccionar las fibras para todo tipo de telas; por su maestría en el tejido, los españoles narraban en sus cartas a España el cuidado y sofisticación de los diseños de estos tiempos.
En la época colonial de la Nueva España, además del algodón, se comenzó a utilizar la lana y la seda como tejidos comunes; el algodón se seguía usando por los indígenas, pero el impulso de la corona se crearon los “obrajes del algodón” para la exportación de telas y ropa de este material.
En el siglo XVII los obrajes lograron un gran desarrollo, reflejando el ejemplo de la empresa textil colonial, estas actividades se aglutinaban en las ciudades de Puebla, Ciudad de México, Tlaxcala y Texcoco con gran auge, y normalmente la mano de obra era femenina. Para el siglo XVIII comenzó una debilitación de la industria textil mexicana por el impacto e importación de las telas inglesas. La Revolución Industrial provocó esta desviación de producción, donde los obrajes ya no pudieron competir.
Este fenómeno provocó la defensa de los productos textiles por la corona española, para evitar la masificación de los productos extranjeros. Es un precedente de los impuestos arancelarios para evitar la competencia desleal, las crónicas de la época mencionan las leyes, pero los impedimentos con los funcionarios corruptos de las aduanas, que no hacían valer los reglamentos. Al intentar palear los textiles de procedencia inglesa, se promovieron las importaciones de España, también afectando los obrajes y comercio local.
Los comerciantes y dirigentes de la empresa textil mexicana, optaron por desarrollar la manufactura del algodón para competir contra estas presiones. Con la creciente población urbana, la implantación de un esquema obrero tomó más importancia, dándole más fuerza e influencia a los propietarios de esta industria.
El impulso textil durante la Independencia de México se consolida con su legado prehispánico y colonial, dando en el siglo XIX una base sólida. Con los cambios de esta época los tejedores, comerciantes e industriales reclaman la imposición de aranceles a las importaciones de España y otros países.
En la historia no tan conocida de las pugnas independentistas, y posteriormente en la época de la Reforma en el siglo XIX, los liberales y conservadores tenían dos posturas encontradas en el tema textil. Al contrario de lo que la lógica podría afirmar, los liberales pensaba en la importancia de exportar productos mineros y agrícolas para el desarrollo del país, y de la industria textil no le daban demasiada importancia.
Por su desarrollo con los talleres e industria textil, México llego a tener un gran desarrollo en esta materia, esto significó ser más competitivo que los países de Centro América y Sudamérica al construir máquinas de telas. Con la participación de España en las guerras napoleónicas, todas sus exportaciones quedaron en el mínimo, lo que permitió a México poder llenar ese hueco de mercado.
Del apoyo de la transformación de todos los sectores productivos de las victorias de la reforma, se llevó a un mayor nivel de tecnología e inversiones extranjeras en el Porfiriato. La experiencia de siglos en el sector, solo adaptó la nueva tecnología, permitiendo con la apertura de caminos y vías ferroviarias el transporte de las mercaderías; de esta forma, con un sólido cultivo de algodón y otras materias, se amplió el mercado hacia el interior de la república y a nivel mundial.
Después del periodo caótico de la Revolución Mexicana, se reconstruyó la empresa textil mexicana, con nuevas tecnologías y esquemas laborales sindicales desarrollando en todos sus aspectos su competitividad, calidad y variedad de productos. Esto provocó mayos exportaciones y de manera natural geográfica se dirigió este tráfico hacia los Estados Unidos. Ahora a su vez en este país, surgió el proteccionismo para frenar la venta de los productos textiles mexicanos.
En los años 70, la industria de Asia, con los países de Japón, corea y otros países asiáticos creció de una manera descomunal, importando sus productos a todo el mundo y los Estados Unidos. Ante tal problema comercial, las grandes potencias crearon el Acuerdo Multifibras (AMF) de 1974 para regular el comercia mundial de productos textiles y de confección. Se establecieron límites, llamados cuotas, sobre la cantidad de artículos de indumentaria y textiles hechos en el extranjero que podía entrar en sus países de cualquier otro país productor específico. Desde 1974, se aplicaron cuotas a 73 países en el Sur global, mayoritariamente en Asia.
Desde el año 2005 se emprendió esfuerzos multinacionales, de los países en desarrollo para derogar estas cuotas y frenos a la industria, siendo la empresa textil mexicana una de las mayores incansables del mercado.
En Sanper México tenemos una amplia experiencia en textiles, desde el año 2003 en diferentes industrias productivas como la automotriz y de calzado. La calidad y satisfacción de nuestros clientes nos recomiendan para cualquier proceso productivo. Para más información contáctenos en nuestra página web, redes sociales, correo electrónico, formularios en línea o nuestros teléfonos para ofrecerle las mejores cotizaciones del mercado.