¿Conocen el termoconformado que aplicamos a nuestros productos?

En SANPER somos una de las empresas textiles en México comprometidas con la innovación en nuestros productos y procesos. Esto nos ha permitido contar no solo con un catálogo muy amplio, sino una larga lista de clientes satisfechos del sector calzado, automotriz, entre otros. Hay un proceso del que no hemos hablado, pero que es importante en nuestro abanico de procesos, ya que nos permite desarrollar productos como las chinelas: el termoconformado.

Es una excelente opción aplicable para el desarrollo de calzado, en el que las empresas textiles tienen un papel importante. Permite crear piezas de excelente calidad, personalizadas y en una gran variedad de materiales, sin realizar altas inversiones ni pérdidas de detalles. A continuación, hablaremos con mayor detalle acerca del termoconformado, sus ventajas, etapas y aplicaciones.

¿Qué es el termoconformado?

Se trata de un proceso consistente en el que se calienta una lámina o plancha de termoplástico, de modo que se reblandezca y sea posible su adaptación a la forma del molde mediante la aplicación de presión o vacío.

Es importante saber cuál es la temperatura requerida en la lámina que funge como sustrato de las chinelas, debido a que puede fundirse si es demasiado alta o no obtendrá la forma requerida si es muy baja. El proceso es complejo, por lo que solo las empresas textiles en México con amplia experiencia pueden aplicarlo efectivamente.

Estos consideran que la pieza a termoconformar sea desmoldable, es decir, que se retire fácilmente del molde. A ello se debe que se usen termoplásticos y polímeros específicos, como la goma EVA 100% virgen o el poliuretano, aunque es posible utilizar diferentes materiales para la fabricación de calzado. A dicha capacidad de desmoldar se le conoce como ángulo de salida o desmolde y, generalmente, es de al menos 3°. Otro aspecto que se considera es que la parte superior debe ser menor que la base.

Etapas del termoconformado

Si bien hay diferentes variables y el proceso aplicado por las empresas textiles en México requiere mucho tiempo, es posible establecer tres etapas que lo conforman:

Calentamiento

Aquí se aplica una de las siguientes opciones: convección, radiación o contacto.

Moldeo

Tras calentarse, el semielaborado es estirado por diferentes métodos para que se adapte al molde, sea vacío, presión, ambos o contramolde.

Enfriamiento

Inicia al entrar en contacto el molde con el polímero o termoplástico y se enfría a temperatura ambiental o con sistemas de ventilación. Concluye al lograrse un enfriamiento tal que permite desmoldar la pieza sin deformarla.

Parámetros que se consideran durante el proceso

Al igual que cualquier proceso de transformación de plásticos, se consideran varios parámetros para que el producto sea de calidad. En el caso del termoconformado, son los siguientes:

Temperatura

Para este parámetro se considera el material a termoconformar, la complejidad de su forma y su densidad.

Lapso de calentamiento

Aquí influye considerablemente el espesor de la lámina e igual es importante que la temperatura sea uniforme.

Periodo de enfriamiento

Al igual que el primer parámetro, se considera el tipo de material, su grosor y complejidad y asegurar que el enfriamiento sea uniforme.

Vacío o presión

En este parámetro se considera la complejidad de la pieza y su espesor. Con respecto a la presión, es importante que no sea demasiada para no dejar marcas o roturas y que no sea insuficiente para lograr la definición requerida.

Es importante mencionar que el termoconformado no es un proceso único, sino que hay variaciones que dependen del material a tratar, por ejemplo, termoconformado mediante molde coincidente, al vacío, a presión con núcleo, con colchón de aire, mecánico, libre, entre otros.

Con respecto a los moldes usados en la industria textil en México y otras, se utilizan varios materiales, por ejemplo:

Maderas

Usualmente, son secadas en horno y se les aplica barniz para evitar porosidad. Su enfriamiento requiere mucho tiempo y se usan para pequeñas series.

Escayola

En algunos casos, se le agrega fibra de vidrio en un 5% para aumentar su vida útil.

Poliéster reforzado con fibra de vidrio

Es un excelente molde que permite producciones de hasta 500 piezas.

Colado de resina époxi

Destaca por ser más resistente que los casos anteriores y soportar temperaturas muy altas. Esto permite producir series de hasta 1,000 piezas.

Aceros blandos

En este caso, permiten acabados de calidad y mecanizados sencillos.

Aluminio

Su mecanizado es sencillo y se enfría rápidamente, por tal motivo, se usa ampliamente para altas producciones.

¿Por qué recurrir al termoformado para obtener piezas como las chinelas?

Hay varias razones, aunque solo es posible percibirlas si se acercan con una empresa confiable y con experiencia como SANPER, por ejemplo, es un proceso rentable, lo que lo vuelve ideal para pequeñas y grandes tiradas. Es posible trabajar con muchos materiales, como la goma EVA, PET, policarbonato, poliuretano, PVC, entre otros. Con respecto a los moldes, su construcción es barata y son rápidos de producir. Por último, el proceso es ideal para crear prototipos antes de iniciar el diseño que desean.

Si desean chinelas de alta calidad fabricadas según este método u otros productos para el calzado, contacten nuestra empresa textil. Soliciten más información al (55) 7034 3371 o completen el formulario disponible en nuestro sitio web.